Vecinos comentaban que algunas respuestas de Macri, cuando no acordaba con reclamos u opiniones, sonaban un tanto agresivas • “Se fastidia mal”, coincidían.
Jorge Macri retomó en Villa Devoto una práctica clave para la comunidad, y que fue un sello de gestión para Horacio Rodríguez Larreta: escuchar a los vecinos cara a cara y responder a sus inquietudes concretas. El encuentro, realizado el 25 de septiembre en el Club Laureles Argentinos, reunió a unos 70 vecinos. Junto a Macri, participaron Nicolás Mainieri (Presidente de la Junta Comunal 11), y los secretarios Juan Ignacio Salari (Mantenimiento Urbano) y Darío Antiñolo (Tránsito).
Los reclamos reflejaron las preocupaciones reales del barrio, con énfasis en la situación de la Cárcel de Devoto, el funcionamiento de los barrenderos, la calidad en las reparaciones urbanas y la necesidad de más árboles, poda e iluminación. Vecinos destacaron la urgencia de que las empresas responsables de servicios se hagan cargo de arreglos mal realizados. “El gobierno local ya modificó la licitación para que estas cubran los costos de las correcciones”, aseguró Macri.

Unas setenta personas elevaron reclamos al Jefe de Gobierno y funcionarios de mantenimiento urbano y tránsito que lo acompañaron.
La cuestión del traslado de la cárcel fue un tema recurrente, con el compromiso confirmado de que la mudanza a Marcos Paz concluirá a fin de año. El Jefe de Gobierno asumió que se iba a dar paso a un proceso participativo sobre el futuro del predio.
El encuentro también sirvió para abordar la puesta en valor de espacios verdes y mejorar el tránsito y el estacionamiento. Aquí el Secretario Antiñolo, a cargo del área, confirmó que se iba a realizar un operativo de saturación de agentes para controlar el estacionamiento (nota).
Otros temas relevantes tratados fueron, los problemas de la basura y los contenedores, la ampliación de la red de ciclovías en la zona, la mala señalización de los cortes por obras, la falta de policías y la falta de cámaras de seguridad en algunas zonas y que sucederá con los decks gastronómicos.
El diálogo directo con las autoridades representa una oportunidad para que la comunidad de Villa Devoto y Comuna 11 se sienta protagonista en el proceso de transformación de su entorno.
CASA DE BEIRÓ

“¿Podemos hacer una vaquita?”
Jorge Macri, durante la reunión con vecinos en Devoto, respondió a un pedido de la vecina Mónica Hernanz, sobre la ley de expropiación que cursa en la Legislatura y el deterioro de la histórica casa de Francisco Beiró (José Luis Cantilo y Marcos Paz). Ante la propuesta de expropiar y restaurar la propiedad para convertirla en un museo de la democracia o centro cultural, Macri propuso explorar hacer una “vaquita” o contribución económica entre los vecinos interesados. Sin embargo, su enfoque principal se centró en vincular su recuperación a la “ley de plusvalía”, citando como ejemplo el proyecto de Curitiba, en Brasil. Macri enfatizó entonces en que “sería mejor vincularlo con algún otro proyecto en una zona receptora” antes que una expropiación directa. La vecina aclaró que la casa fue declarada patrimonio histórico por ley en 2008, lo que la haría elegible para proyectos bajo la plusvalía que buscan conservar valores patrimoniales.