> En el cruce de San Martín y Cuenca abrió este bar que se ofrece para parejas, familias, amigos y hasta eventos o celebraciones.
En copa y vino, como las opciones posibles para disfrutar de un buen vino. Con el recurso del inglés de por medio, pero con ese espíritu, nació hace menos de un mes una nueva propuesta del sector gastronómico de Villa Devoto orientado al sector vitivinícola. Hablamos de Glass and Wine Bar, situado en Avenida San Martín al 5900, esquina Cuenca.
Glass and Wine se inauguró el 29 de junio pasado. Gonzalo Forastiero, su propietario, eligió el lugar porque es “una zona referente a mi entorno, ya que nací, pasé mi infancia y vivo en Villa del Parque, muy cerquita”. Él dice sentirse como en casa, ya que sus amigos y conocidos son todos de la Comuna 11.
A ello le sumó la esquina de San Martín y Cuenca, que eligió especialmente para montar el nuevo bar. “Es un cruce que siempre me gustó, es muy vistoso y pasan muchos autos. Son dos calles muy referentes de la zona”, afirma. En las semanas que lleva con las puertas abiertas, la tienda tuvo una muy buena recepción de parte de los vecinos devotenses. “Es muy importante, porque nos impulsa a que se sientan cómodos y contentos”, dice Gonzalo.
La propuesta no se dirige a un perfil de cliente en particular, sino más bien variado. “Recibimos familias, amigos, parejas, personas jóvenes. Hay también sectores para reservar cumpleaños, o hacer eventos. Es un ambiente lindo y para todos, con buena comida y ricos tragos”, describe el dueño de Glass and Wine.
En cuanto al menú, hay ofertas para acompañar la bodega de vinos. “Como platos principales, recomiendo los tallarines caseros con pulpetines, la bondiola con salsa especial, la milanesa napolitana, el pastel de papas o la hamburguesa de carne desmenuzada. También hay buenos postres: “la copa limeña, con merengues, los panqueques de dulce de leche, o el volcán con helado de americana”.
Incursionar en la gastronomía no es nuevo para Gonzalo ni para Alejandro y Claudio, sus hermanos que, destaca, lo acompañan en el día a día. Es que son nietos del fundador de El Rincón de los Artistas, una reconocida dedicada al tango en Álvarez Jonte y Boyacá. “Cuando salía de la escuela, o el fin de semana, iba con mi papá a ayudarlo y me sirvió para crecer gastronómicamente”, confiesa.